No es extraño que ante una pregunta
complicada o que necesite cierta reflexión automáticamente miremos hacia arriba
o cerremos los ojos. Pero, ¿Por qué hacemos esto?, ¿Por qué miramos a arriba o cerramos los ojos al pensar?
Debemos saber primero que nuestra
información se almacena en el cerebro acuerdo a una clasificación. Por tanto,
el cerebro ha de “buscar” en nuestra mente como si de google se tratara.
El mirar al cielo no tiene ninguna
explicación divina. El hecho de mirar hacia arriba, lejos de estar buscando la
ayuda de los dioses, significa que estamos visualizando la pregunta. Además, en
el cielo solemos encontrar menos distracciones que al nivel habitual, lo que
incrementa la concentración.
Si te das cuenta, cuando nuestra reacción a
la pregunta es hablar con nosotros mismos, nuestros ojos miraran inmediatamente
hacia abajo o a la derecha.
En el caso de que la pregunta esté
relacionada con sonidos, miraremos horizontalmente hacia la derecha y a la
izquierda.
Si lo que hacemos es valorar si la
pregunta es lógica o estamos intentando recordar una experiencia reciente,
nuestros ojos mirarán arriba a la derecha.
Por último, si reaccionamos cerrando los
ojos, significa que necesitamos una gran concentración para responder a la pregunta, y estamos
centrándonos en el pensamiento y evitando estímulos exteriores.
Tras saber todo esto, ¡a ver si en la próxima
pregunta que te hagan vas a estar más pendiente de la respuesta o de hacia dónde miras!
Tenemos más secretos de los que parece…
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