El origen de la Navidad

Esta fiesta pertenece al año litúrgico Cristiano, en la que se recuerda el nacimiento de Cristo. En la Cristiandad occidental cae el día 25 de diciembre, mientras que en la oriental el 6 de enero. El nacimiento de Jesús se remonta aproximadamente a los años que van del 10 al 4 a.C.. La Navidad no se introduce de inmediato como festividad Cristiana, habrá que esperar hasta el cuarto siglo después de Cristo (353 d.C.).

La festividad cristiana se cruza con la tradición popular: antes de la Navidad Cristiana se celebraba la fiesta del Fuego y del Sol, que cae en el solsticio de invierno, el 21 de diciembre. Este día es el más corto del año y a partir de este las horas de luz empiezan a aumentar, representa el principio del invierno y motivo de celebraciones, con tanto de hogueras en los bosques, y sacrificios a los dioses desde las épocas más remotas.

Hace ya 3.600 años en Persia se celebraba, el 25 de diciembre el nacimiento de Mitra, hijo del Sol y Sol él mismo. En Egipto se rememoraba el nacimiento de Osiris y de su hijo Oro. En Babilonia se celebraba el dios Tammuz, único hijo de la diosa Istar representada con el niño en los brazos y con una aureola de doce estrellas al rededor de su cabeza. En México se celebraba el dios Quetzalcoatl y en Yucatàn la del dios Bacab. También el dios azteco Huitzilopoctli fue dado a luz el día 25 de diciembre, mientras los escandinavos celebraban el nacimiento del dios Freyr. En Grecia nace Baco y en Siria, Adonis.

Porqué los nacimientos sacros el día 25 y no el 21? Existe una creencia que se remonta a tiempos muy muy lejanos, en los días que van del 22 al 24 de diciembre parece que el Sol, en su moto aparente, se para (Solstitium significa “Sol parado”): y es, por lo tanto, el momento de máximo declino del astro.

El 24 el Sol parece retomar su movimiento, cada día un poco más hasta el Solsticio de Verano. En la Antigua Roma para saludar el Solsticio de Invierno se celebraban los Saturnalia, en honor de Saturno, dios protector de la agricultura. Las celebraciones duraban desde el 17 hasta el 24 de diciembre y durante este periodo los tribunales y los colegios se cerraban, se intercambiaban regalos y visitas, las clases sociales desaparecían. Incluso los juegos de azar que normalmente eran prohibidos, en estas fechas se toleraban. El día 24 se concluía con un gran festín, incluido de velas y luminos, brindis e intercambio de felicitaciones. El día 25 era dedicado al Sol Invicto: el sol resurge y vuelve a brillar, a calentar y a devolver la Vida en la Tierra. Gracias a la expansión hacia Oriente del Imperio Romano, soldados y mercantes entran en contacto con el culto de Mitra. La cultura romana se impregnò tanto de este mito que Aureliano en el 274 d.C. tuvo que oficializarlo. Es de aquí que tiene origen la tradición del tronco de Navidad , tronco que se quemaba por 12 días consecutivos y tenía que ser preferentemente de roble y dependiendo de como quemara se hacía un presagio de como sería el año siguiente. Actualmente, el tronco de Navidad ha sido sustituido por luces y velas que decoran las casas, los arboles y las calles. La Epifanía, una de las principales fiestas cristianas que cae el 6 de enero, nace en las regiones orientales como conmemoración al bautizo de Jesús. Esta fue rápidamente introducida en occidente con connotaciones religiosas diferentes, como recuerdo de la ofrenda de los “Reyes” Magos al niño Jesús. En algunos países, como en España quienes traen los regalos, en esta fecha, son los reyes magos, en otros como en Italia es la figura de la Befana.